sábado, 30 de marzo de 2019

EL FAROL DEL ACUEDUCTO Y LA ILUMINACIÓN DEL AZOGUEJO (1850-1889)

     Hace cuatro días al aumentar mucho una foto y fijarnos detalladamente nos quedamos perplejos. Nada menos, que pudimos ver cómo en la plazuela del Azogejo hubo una farola engarzada a una pilastra del Acueducto. Ante ese hecho y preguntándome varias personas que se habían quedado tan perplejos como yo, me puse a buscar entre mi colección de fotos antiguas y las de algunos amigos, cuánto tiempo pudo estar esa farola. 

     Con sólo fotos antiguas y a falta de comprobar datos en fuentes escritas como pudiera ser las propias actas del Ayuntamiento hemos decidido escribir una entrada divulgativa en el blog. La suposición de que debe haber fuentes escritas es porque poner una farola en el propio Acueducto no puede ser una decisión tan ligera como para no tener constancia escrita. Todo ello considerando la declaración del Acueducto como Monumento Nacional en 1884. 

     Buscando imágenes y teniendo una buena datación de ellas hemos podido llegar a la conclusión de que la farola debió estar entre treinta y treinta y cinco años, entre 1852 y 1889. Nunca después de esa fecha con absoluta seguridad, pero otra cosa sería el año de su instalación.

    Para saber cuándo se instaló la farola buscamos una foto que tuviese una buena datación. Al revisar las imágenes del amigo Juan Francisco Sáez comprobamos que en la foto de Alphonse De Launay con fecha escrita de 1854 se puede apreciar la farola en la segunda pilastra a la derecha de la cruz como bien sabíamos desde la primera vista en foto de Laurent. Por lo cual se instaló anteriormente y pensamos en 1852. Además, podemos comprobar una tradición segoviana de tender la ropa en los monumentos.


      De nuestra colección en la foto de Claude Marie Ferrier y aun estando escaneada a máxima resolución la gran luminosidad sobre el Acueducto nos hacía pensar que no estaba, pero al revisar el cristal con el cuenta hilos se llega a ver algo, que es la farola sabiendo la pilastra donde se encontraba. La datación de la foto de Ferrier es de 1860 y nos lo confirma la casa que se destruyó en un incendio en 1861 según nos informó el amigo Alfonso Ceballos.


    Como podemos comprobar no se aprecia que hubiese otra farola en la propia plazuela del Azoguejo. Al fondo podemos ver bien la espadaña con las correspondientes campanas del convento de San Francisco al igual que en la de De Launay. En cambio, aunque no se aprecia demasiado en lo alto del Acueducto está una de las casetas de vigilancia de las Guerras Carlistas. 

     Después, nos fijamos detalladamente en una foto con una perspectiva muy similar que por un reciente estudio se sitúa en 1863. La imagen tiene marca H*B relacionada con un viaje de Eugenia de Montijo a España, que ya era la esposa de Napoleón III y correspondería a un fotógrafo de apellido Bonaparte. En esa foto, que no tiene buena nitidez, de nuevo se ve algo que debe ser la farola.


    Seguimos buscando fotos antiguas, detalles ampliados, etc y encontramos una buena imagen en la cual se aprecia bien la farola del Acueducto. Correspondería a una foto realizada por Jean Laurent, y consideramos realizada circa 1865.


     Al aumentar la foto pudimos comprobar que en la pilastra segunda a continuación de la de la cruz y arriba la virgen, ya aparece la farola. Por otros estudios realizados dedujimos que las dos casetas de vigilancia de las Guerras Carlistas se quitaron hacia 1870 y sería una de las primeras actuaciones del arquitecto Odriozola desde su cargo municipal.

    Seguimos viajando en el tiempo y la imagen inicial que ha provocado esta breve investigación la datamos en 1871 porque ya no están las casetas de vigilancia. En la foto original de la Biblioteca Nacional consta escrita la fecha 6 septiembre 75 con el sello original de J. Laurent y Cía con direcciones de: 90 R. Richelieu Paris y 39 Carrera San Gerónimo Madrid. Suponemos que la fecha es la de compra de la foto, pero la imagen como máximo estaría realizada en 1873 que es otra de las fechas que tenemos datada como año que Laurent hace toma de imágenes segovianas. En la imagen de Jean Laurent hemos hecho un recuadro de la zona que vamos a aumentar teniendo en cuenta la gran nitidez de la imagen.


      Cuando aumentamos al máximo la imagen podemos ver bien la situación de la farola y el lugar de engarce a la pilastra del Acueducto.


     El buen detalle de la imagen nos ha llevado al atrevimiento, por mi parte, de hacer un dibujo aproximado de la estructura sobre la que se apoya la farola.


    Teniendo en cuenta la datación de 1871 la farola debía ser de algún material que provocase una llama y mediante base y techo reflectantes hiciese mayor ampliación lumínica. Seguramente la forma de donde saliese la llama debía tener un volumen suficiente para el material a quemar (una especie de petróleo, aceite ...).

      Parece razonable suponer que la declaración del Acueducto como Monumento nacional histórico y artístico por R.O. de 11 de octubre de 1884 fuese una fecha adecuada para la eliminación de esa farola de la pilastra e instalar una en la plazuela del Azoguejo. Instalada ya la farola en el centro del Azoguejo tenemos una imagen de mi colección de un cristal editado en Alemania circa 1887 que nos muestra la plazuela con los restos de la iglesia de Santa Columba.


     Pero acudiendo a las imágenes de fotógrafos profesionales, con seguridad, tenemos la foto del amigo Juan Francisco Sáez realizada por Lucien Levy en 1888. En la foto realizada un domingo, por los puestos de mercado que vemos, se aprecia nítidamente esa gran farola para todo el Azoguejo que también sería de algún combustible con llama.


     Según la prensa de la época esa magnífica farola daba poquísima luz. Como siempre escribiendo en verso en La Tempestad del 25 de marzo de 1888 hacen alusión joco-satírica de que da tan poca luz que "en lugar de luz da sombra".


    Sin embargo, con las dos anteriores perspectivas no podíamos comprobar si realmente habían quitado la farola engarzada al Acueducto porque no llegamos a ver la segunda pilastra a partir de la cruz. Era posible que hubiesen puesto la farola de pie en el centro de la plazuela del Azoguejo además de que estuviese la del Acueducto. Por ello, de nuevo buscamos alguna forma de demostrarlo y encontramos una aclaratoria imagen de James Jackson de mi colección, con fecha exacta del 29 de abril de 1889 para lo cual hemos realizando el siguiente detalle.


     Finalmente, alguien me comentó que entonces tenían que estar las marcas en las piedras de la segunda pilastra del Acueducto con las correspondientes cavidades para engarzar la estructura. De modo que pensé que lo más probable era que en la restauración realizada en 1930 o bien en la de 1973-1974 esas cavidades se taparían por lo cual tenía que conseguir imágenes anteriores lo suficientemente claras para verlo. De nuevo nuestro ilustre paisano Julio Duque Berzal nos iba a resolver el problema.

      En 1909, o incluso antes, pudo tomar la foto del Acueducto cuyos positivos utilizaban los alumnos de la Academia de Artillería para enviar recordatorios postales de la ciudad a sus seres queridos. Nosotros nos hemos centrado en la base de las pilastras del Acueducto y necesitábamos tener a la vista la segunda pilastra y hemos señalado dónde vamos a hacer la ampliación.


     Al hacer un gran aumento y teniendo en cuenta la calidad de la imagen podemos comprobar cómo los agujeros de los engarces metálicos se mantenían además de las cavidades de las tijeras para la colocación de las piedras en su construcción. Probablemente cuando Duque toma la foto habían pasado poco más de veinte años de cuando se quitaron las lengüetas metálicas de manera que a su vez nos ayudaban a saber cómo debía ser la estructura y por eso nos atrevimos a hacer un dibujo.


     Para acabar, ayer al hablar con Rafa, el archivero municipal, me comentó que hay una maqueta antigua de madera del Azoguejo en el Archivo Municipal en la cual está representada esa farola del Acueducto, pero que no se sabe de cuándo procede. A partir de 1891 ya empezaría a instalarse el tendido eléctrico en Segovia y desaparecería poco después esa farola, porque en 1893 ya se había instalado un quiosco que tenía encima una farola con bombilla eléctrica.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
       Esta entrada se la dedico a los amigos Juanfran, Juan Pedro y Juanjo por los buenos ratos que nos pasamos hablando y comentando datos de nuestras fotos de coleccionismo. Además, a las Marías por darnos siempre su apoyo en querer conocer cosas sobre Segovia.
       Todo ha sido posible gracias a:
Las fotos facilitadas amablemente por el amigo Juan Francisco Sáez Pajares.
El archivo de la foto Nº 287 Segovia de Jean Laurent (1816-1886) de la Biblioteca Nacional.
El Acueducto en la fotografía Colección Sáez-Laguna. Editado por el Ayuntamiento de Segovia. Segovia 2009.
Una imagen de España, fotógrafos estereoscopistas franceses (1856-1867). AA.VV. Fundación Mapfre, Instituto de Cultura. Madrid, 2011.
Gaceta de Madrid del 20 de octubre de 1884, Núm 294.
La Tempestad semanario festivo del 25 de marzo de 1888 dirigido por Júpiter [Vicente Rubio Lorente], Año IX, Tormenta 400, del Archivo Municipal de Segovia.
Segunda vista por Chusseau-Flaviens (segunda parte) del blog del amigo Aku Estebaranz.
James Jackson en Segovia del blog del amigo Aku Estebaranz.
Mi colección de postales, fotos y libros antiguos sobre Segovia de los últimos 21 años.

domingo, 24 de marzo de 2019

ÁNGEL REVILLA MARCOS: Un estudio biográfico (1891-1946), parte primera.

       Este estudio tiene su origen en el encargo, aceptado por mi parte, de hacer una reseña biográfica de Ángel Revilla Marcos (1891-1975) para el diccionario biográfico de personas relacionadas con la Universidad Popular Segoviana (UPS), que este año cumple el centenario de su fundación. Aunque actualmente se llame Real Academia de Historia y Arte de San Quirce es la heredera directa de esa Universidad Popular habiendo pasado por cien años de importantes acontecimientos históricos: dos dictaduras, una democracia, una república y una guerra civil nada menos.

      Antonio Machado nada más llegar a Segovia el 26 de noviembre de 1919 se incorporará de inmediato a este "Ensayo de Universidad Popular Segoviana" que había comenzado a gestarse cinco días antes por iniciativa de varios profesores del Instituto y de la Escuela Normal de Maestros junto con destacadas personalidades segovianas, como el médico Segundo Gila Sanz y el arquitecto Francisco J. Cabello.

    Ángel Revilla fue el catedrático de Literatura española del Instituto de Segunda Enseñanza oficialmente desde finales de junio de 1929. Sin embargo, ganada la plaza por concurso de traslado, no se incorporará al centro segoviano hasta abril de 1930. A partir de ese momento Antonio Machado Ruiz no podrá impartir las asignaturas de Lengua castellana-Gramática o Historia General de la Literatura como sabemos probadamente por los expedientes académicos, del archivo de mi Instituto de Dioniso Ridruejo y de Francisco de Cáceres Torres.

ESTUDIO BIOGRÁFICO

     Nace en Salamanca el 25 de febrero de 1891. Suponemos que pasa sus primeros años en Salamanca, estudiando la enseñanza primaria, secundaria con varias matrículas de honor y superior. En la Universidad de Salamanca donde estudió fue alumno de Miguel de Unamuno. Su madre, Juana Marcos Esteban, era salmantina y su padre Perfecto Revilla Monge fue durante muchos años secretario del Ayuntamiento de Dueñas (Palencia).

     En 1913 se presenta por primera vez a la oposición para la cátedra de Literatura vacante en los Institutos de Cáceres, Jaén y Teruel por el turno libre. Durante 1917 fallece su hermana Amelia quedando como hijo único. En 1918 ya es doctor en Letras por la Universidad de Salamanca y en julio de ese año se casa con la cacereña Basilisa Benet Vasco.

Comienzos de Catedrático de Lengua y literatura en el Instituto de Lugo
      Oficialmente el 25 de junio de 1920 gana la cátedra del Instituto General y Técnico de Lugo. Allí escribirá varios libros, de crítica literaria, de texto y una novela. Además, da alguna conferencia en el Círculo de las Artes de Lugo:
       José María Gabriel y Galán, su vida y sus obras. Madrid, 1923 prologado por Unamuno.


      Algunas viejas ideas para la educación. Imprenta de los sucesores de Hernando. Madrid, 1924.
      Programa de Elementos de Historia General de la Literatura. Mauro Lozano. Segovia, 1925.
     Dionisio y otras dos novelas. Madrid, 1928 con prólogo de Plácido Pérez Castiñeira y epílogo de Narciso Alonso Cortés. 
   
Llegada a Segovia
      En la Gaceta de Madrid del 26 de junio de 1929 aparece su nombramiento como Catedrático numerario de Literatura Española en el Instituto de Segunda Enseñanza de Segovia. Con lo cual inicialmente se debía incorporar en el curso 1929/1930, pero según la historia del Instituto realizada por Rafael Hernández con el archivo del centro, se incorpora en abril de 1930. Deducimos por tanto que coincidirá en el Claustro del centro segoviano con Antonio Machado durante los cursos académicos 1929/1930, 1930/1931 y 1931/1932*.

      Cuando llega a Segovia lleva casado más de diez años con Basilisa Benet, nacida en Malpartida (Cáceres) y poco después de la muerte de su padre en 1934, convivirán con ellos la madre y la tía de don Ángel.


     Pasados unos meses, será invitado a dar una conferencia el jueves 12 de febrero de 1931 en el salón de San Quirce de la Universidad Popular Segoviana, sobre el tema Del Romancero a las Mocedades del Cid, de Guillén de Castro.


    
    Dos días después, estuvo el sábado 14 de febrero de 1931, en el famoso acto desarrollado en el Teatro Juan Bravo de Segovia organizado por la Agrupación al Servicio de la República. En la foto que el fotógrafo Alfonso Sánchez García inmortalizó apreciamos a muchos de sus compañeros del Instituto: Machado, Julián S. Blanc, Agustín Moreno, Ricardo Riesco, Rubén Landa... Y es que don Ángel era, en ese momento, afín a la agrupación de Manuel Azaña, Acción Republicana.


      Durante el mes de junio de forma entusiasta y desinteresada dio varios mitines por la provincia de Segovia siguiendo las directrices de la Agrupación al Servicio de la República. En ellos explicaba pedagógicamente el nuevo régimen democrático para las elecciones constituyentes del 28 de junio de 1931 a favor de la Conjunción Republicano-Socialista.   

      En el verano de 1931 la Universidad Popular Segoviana estaba formada por: Francisco Javier Cabello Dodero (Director), Antonio Machado Ruiz (Director honorario), Segundo Gila Sanz, Agustín Moreno Rodríguez, Mariano Quintanilla Romero, Antonio Ballesteros Usano (Secretario), Manuel Palomares Millán, Juan Zuloaga Estringana, Rubén Landa Vaz, Fernando Arranz López (nombrado en 1927 se mantenía en Argentina y no había tomado posesión), Juan de Contreras y López de Ayala (marqués de Lozoya), Alfredo Marqueríe Mompín, Antonio Mazorriaga Martínez, Marceliano Álvarez Cerón y Fernando Gallego de Chaves y Calleja (marqués de Quintanar). A finales de diciembre, el Inspector jefe de Primera Enseñanza, Antonio Ballesteros, pasará a ser profesor correspondiente por su traslado a Madrid y se nombra profesor de la UPS a Ángel Revilla Marcos con fecha 31 de diciembre de 1931.

      Muy probablemente son sus compañeros del Instituto, Machado, Agustín y Rubén los que le fueron introduciendo en la Universidad Popular Segoviana. Su primera intervención oficial en la UPS es en la tarde noche del miércoles 2 de noviembre de 1932 pronunciando una amena charla sobre la vida y algunas de las obras de Jerónimo de Alcalá Yáñez y Ribera, para posteriomente instalar una placa conmemorativa por el III centenario de su muerte, creada por su compañero Juan Zuloaga.


      Gracias a la amabilidad del amigo Alberto García Gil podemos comprobar cómo don Ángel hacía excursiones con sus alumnos durante 1933. En la imagen vemos sentado en la escalera a don Ángel con sus pupilos con la mano en la barbilla. En la excursión estaba la alumna María Elia Gil, madre de los hermanos García Gil, que seguro recordó durante mucho tiempo la visita guiada por Revilla a su ciudad de nacimiento.


     A partir del curso académico 1933/1934, con el nuevo gobierno de Diego Martínez Barrio siendo ministro de Instrucción Pública, Domingo Barnés Salinas, es agregado al Instituto Nacional de Segunda enseñanza Quevedo de Madrid para desempeñar el puesto de Director del Centro, siendo el Secretario José Luis Asián Peña. Este centro de nueva creación republicana empezaría a funcionar en diciembre de 1933. Allí se mantenía después de año y medio cuando es nombrado, en octubre de 1935, Vocal de la Junta Económica Central del Instituto de Segunda Enseñanza.

Penurias y cárcel durante la Guerra Civil
      La sublevación militar del 18 de julio de 1936 siendo, desde 1934, Director interino del Instituto Quevedo le pilla en su residencia de verano de Dueñas (Palencia), de modo que no pudo volver al Instituto madrileño, aunque su plaza oficial de catedrático estaba en el Instituto de Segovia, cubierta interinamente. En el Instituto de Segovia era Director provisional desde  abril José Adellac García.

     Por el bando de 27 de julio de 1936, José Tenorio Muesas, Coronel comandante militar de la provincia de Segovia promulgaba en su primer artículo: "Que serán dados de baja en sus respectivas nóminas todos los funcionarios públicos, del Estado, Provincia y Municipio, que antes del 1º del próximo mes de agosto no se hayan reintegrado a sus oficinas, decretándose el cese el día 31 del actual".

     A continuación se publicaba una circular en B.O. extraordinario de la Provincia de Segovia del 14 de agosto de 1936, del Gobernador civil, Joaquín España Cantos (comandante de la Guardia civil), delegado de la autoridad militar.
       "El Ilmo. Sr. Comandante militar de la Plaza, con arreglo a las atribuciones que le han sido conferidas, se ha servido disponer el cese inmediato en sus respectivos destinos y la baja en nómina a partir del día primero del corriente mes, de todas las personas que por hechos anteriores o posteriores al movimiento salvador de España, hayan demostrado simpatías por las doctrinas de tipo marxista o que por sus actos o palabras hayan incurrido en responsabllidad y se encuentran detenidos a disposición de la autoridad civil o militar desde el 19 de julio último, ya pertenezcan como funcionarios civiles al Estado, Provincia o Municipio o estén empleados en empresas, compañías o particulares.
     Lo que se hace público para general conocimiento y cumplimiento bajo la responsabilidad de sus respectivos jefes, patronos y habilitados"

     En el B.O. de la Provincia de Segovia del 31 de agosto de 1936 se publica el cese y baja en nómina de Ángel Revilla Marcos. Poco después, en B.O.P. de Segovia del 13 de noviembre de 1936 la orden del Rectorado de Valladolid determinando su suspensión definitiva de empleo y sueldo con la incautación de los haberes no devengados. Este cese se hace oficial a nivel de la zona nacional, publicando en Burgos, el Boletín Oficial del Estado de 21 de noviembre de 1936 la suspensión de empleo y sueldo firmada por Fidel Dávila [Arrondo], el 17 de noviembre, como Presidente de la Comisión de Cultura y Enseñanza.

      La crispación de la guerra civil a nivel del centro de Segovia es patente en la significativa Nota del Instituto Nacional de Segunda Enseñanza publicada en el semanario segoviano de Acción Popular Agraria, La Ciudad y Los Campos, Nº 254, de 28 de noviembre de 1936 sobre "Públicas recientemente y por distintos medios de difusión, diferentes actuaciones, imputadas a los ex catedráticos de este Instituto señores Machado Ruiz, Landa Vaz y Jaén Morente, indiscutiblemente censurables, por antipatriotas y contrarias al actual movimiento salvador de España, el Claustro de este Centro no podía mostrarse ajeno a las afirmaciones, que, de ser ciertas, mancillaban el honor colectivo y, en consecuencia, en sesión celebrada el 11 del actual, acordó por unanimidad declarar indeseables a tales señores y estimando a la vez como depresiva la presencia de sus nombres en el Escalafón al que nos honramos en pertenecer". En ese Claustro no estaba don Ángel, por depuración, y a buen seguro teniendo en cuenta su integridad, hubiese votado en contra.

      Según van pasando los años de guerra don Ángel y su familia viven en Segovia y por fin aparece en el B.O.E. del 21 de junio de 1937 la reposición en su plaza de Segovia con pérdida de los haberes devengados durante la suspensión. Es decir, que oficialmente desde el 1 de agosto de 1936 hasta el 20 de junio de 1937, casi once meses, no tuvo sueldo y tampoco tenía derecho a percibirlo después. Sin embargo, esta decisión oficial no significaba que no pudiese tener problemas de encarcelamiento, ya que según el Expediente Nº 1047 de la Prisión Provincial de Segovia, consta "Detenido el 8 de enero de 1938. En libertad el 9 de marzo de 1938". Es decir, que oficialmente desde el 21 de junio de 1937 había vuelto a su cátedra de Segovia, habiendo una dirección conjunta de Daniel Fraga Aguiar y Narcisa Martín Retortillo, pero no tenía libertad absoluta.

Estabilidad en su cátedra y sus cargos ejecutivos iniciales en el Instituto
       Al menos desde 1940 vive con su esposa, su tía Catalina y su madre Juana (hasta que fallece), en la calle de Santa Ana Nº 10 de Segovia. Podemos estimar su situación económica según el B.O.E. del 1 de marzo de 1940, en el que se publica el escalafón de catedráticos de Instituto, donde Ángel Revilla Marcos está en la 5ª categoría con un sueldo anual de 13200 pesetas al igual que sus compañeros José Adellac y Alejandro Llovet, mientras que Agustín Moreno está en la 4ª categoría con sueldo anual de 14400 pesetas.

     Desde octubre de 1943 es nombrado Jefe de Estudios del Instituto, siendo su Director, el sacerdote, catedrático de Latín, José Crecente Vega (1896-1948) y Secretario José Adellac García (1898-1946). En ese cargo se mantuvo durante diez años.

      El catedrático numerario de Matemáticas José Adellac García, que era vecino de don Ángel del Nº 10 de la calle Santa Ana falleció con 48 años dejando viuda y dos hijos: José Ramón y Fernando Adellac González. Con lo cual, don Ángel, que no tenía hijos, hizo un poco de padre y ayudante en los estudios secundarios de ambos.

      En abril de 1946 la Dirección General de Enseñanza Media del Ministerio de Educación Nacional resuelve dejar sin efecto la "suspensión e inhabilitación para el desempeño de cargos directivos y de confianza en Instituciones Culturales y de Enseñanza".

 --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
      Esta entrada se la dedico a JuanMa y a Miguel Adellac, cuyo padre conoció a don Ángel en su casa de la calle de Santa Ana.
       Todo ha sido posible gracias a:
Reseña Histórica del Instituto Nacional de Enseñanza Media "Andrés Laguna" de Segovia. Rafael Hernández Ruíz de Villa, en Estudios Segovianos, Nº 58, Instituto Diego de Colmenares. Segovia, 1968.
Expedientes académicos de Dionisio Ridruejo y Francisco de Cáceres del Archivo del IES Andrés Laguna.
Padrones Municipales de 1945 y 1950 del Archivo Municipal de Segovia.
La Ciudad y Los Campos, Semanario de Acción Popular, Segovia 28 de noviembre de 1936, Año VI, Núm. 254. Gracias al amigo César Gutiérrez.
Academia de Historia y Arte de San Quirce. Datos históricos. Juan de Vera. Segovia, 1980.
La Universidad Popular Segoviana 1919-1936. Manuela Villalpando Martínez. Real Academia de Historia y Arte de San Quirce, Segovia al paso, Nº 7. Segovia, 1999.
La represión franquista de la enseñanza en Segovia. Carlos de Dueñas y Lola Grimau. Ámbito Ediciones. Valladolid, 2004.
Gaceta de Madrid  del 26 de junio de 1929, Núm. 177.
Gaceta de Madrid  del 26 de octubre de 1935, Núm. 299.
Boletín Oficial del Estado, Burgos, sábado 21 de noviembre de 1936, Año I, Núm. 36.
Boletín Oficial del Estado, Burgos, lunes 21 de junio de 1937, Año II, Núm. 244.
Boletín Oficial del Estado, viernes 1 de marzo de 1940, Año V, Núm. 61.
El apoyo en la divulgación sobre Segovia y aliento continuo de Isabel y Rafa del Archivo Municipal de Segovia.
Mi colección de postales, fotos y libros antiguos sobre Segovia de los últimos veinte años.

martes, 5 de marzo de 2019

LA SEGOVIA DE ANTONIO MACHADO (1919-1932): Paseo diario desde la pensión al Instituto (1ª parte)

     Comenzamos una serie de estudios relacionados con Antonio Machado Ruiz (1875-1939) sobre su estancia en Segovia como catedrático de Lengua Francesa en el entonces denominado Instituto General y Técnico de Segovia que hemos titulado La Segovia de Antonio Machado (1919-1932). Tenemos proyectado hacer varios reportajes aprovechando la efeméride de cumplir este 2019 el centenario de su llegada a Segovia. 

    En esta primera entrada hemos recopilado imágenes reales y anuncios de prensa de cómo era Segovia mientras Machado vivió durante casi trece años y queremos reflejar con ellos algunos cambios que se han producido desde entonces. Ahora nos centramos, por tanto, en el paseo que hacía desde la pensión en la calle de los Desamparados Nº 9, luego Nº 11, todos los días al Instituto. Para ello utilizamos las fuentes de personas que lo trataron personalmente: José Tudela de La Orden (1890-1973) que fue su primer contacto directo con Segovia porque ya le conocía de Soria, Mariano Grau Sanz (1902-1986) que habló con él a menudo desde 1922 a 1932 y Pablo de Andrés Cobos (1899-1973) que lo conoció personalmente y fue un gran estudioso de su vida y su obra.

     Grau en su conferencia del 26 de julio de 1951 en los Cursos de Verano para Extranjeros organizados por el Centro de Estudios Segovianos, heredero directo de la Universidad Popular Segoviana, nos decía:

    "Todas las mañanas, Machado salía de la casita de la calle de los Desamparados y ascendía trabajosamente la de Escuderos hasta la plaza Mayor. Después por la llamada calle Real, bajaba al Azoguejo, para volver a subir la dura cuesta de la calle del Angelete -hoy Ruiz de Alda- paralela al Acueducto, hasta el amplio caserón del Instituto General y Técnico. Su alta y robusta figura, un poco bamboleante, discurría a diario por las viejas calles segovianas -tan afines a su espíritu-, con un andar despacioso y sumido en la honda meditación del que va escuchando las voces de su alma."

      Hemos querido reflejar para todo el mundo su recorrido en un mapa de la época en la que nos situamos, entre 1919 y 1932.


       El poeta se mantuvo prácticamente en la pensión de Luisa Torrego Illanas, joven viuda de casi la misma edad que Machado, durante toda su estancia en Segovia. La dueña de la pensión se quedó viuda hacia 1916 con seis hijos pequeños a su cargo: Pedro, Mariano, Fernando, Luisa, Manuel y Félix. Nada más llegar a Segovia, procedente de Aguilafuente donde nació en 1876, trabajó de sirvienta en restaurantes y fondas con lo cual decide regentar una pensión para poder sacar a flote a sus seis hijos.

     Machado salía de la pensión que en esa época se encontraba más o menos de la siguiente forma. "Vivía en la característica calle de los Desamparados, en una casuca de humilde aspecto a la que se entraba por un patinillo lindante con un convento de monjas. Difícilmente se hubiesen hallado una calle y una casa más en armonía con la figura y la intimidad lírica de Machado" (Grau). Esta pensión la consigue José Tudela por un encargo de Machado por carta del 28 de noviembre de 1919 "Una pensión de 5 pesetas con habitación independiente aunque modesta, resolvería el problema por de pronto".


     A continuación bajaba hasta tomar la calle de Covarrubias (antiguamente llamada de Escuderos baja) y comenzaba en continua pendiente por la calle de Escuderos hasta llegar a la plaza Mayor (oficialmente en ese momento plaza de la Constitución). En la calle de Escuderos Nº 19 pasaba por la Posada del Toro, y en el Nº 22 por la tienda de Ultramarinos de Plácido Roque González Egido, instalado hacia 1926.


     En la fotografía podemos ver el principio de la calle de Escuderos antes de llegar al soportal de la plaza. Justo en la segunda puerta, correspondiente al Nº 4, vivía desde su vuelta a Segovia en 1925 su compañero de claustro, catedrático de Agricultura, Alejandro Llovet Vergara, hermano menor de Miguel, regente de la farmacia que habían heredado de su padre.

     Al atravesar el soportal sin vivienda, dejando a la izquierda la librería religiosa La Concepción, y a la derecha el bar La Alegría, llegaba a la amplia plaza Mayor. Algunos días de verano la plaza estaba animadísima en la década de 1920, pero don Antonio en los veranos siempre se iba de Segovia. "Los veranos se ausentaba también de Segovia, pasándolos, por lo general en Madrid...En Madrid vivían su madre y algunos de sus hermanos" (Grau).


      A la derecha en la esquina junto a la calle del Marqués del Arco se había instalado recientemente el quiosco de prensa, un año antes, junto a la terraza del café restaurante La Suiza en 1923. En la foto hemos señalado, en azul, los balcones de la casa de su compañero de claustro, entre 1920 y 1928 Mariano Quintanilla Romero, porque ya en 1928 al aprobar las oposiciones de Filosofía va destinado a Osuna y después coincidirá de nuevo en 1932 con Machado en el Instituto Calderón de la Barca de Madrid.


     Sin embargo, nada más llegar a Segovia, en los primeros meses de 1920 en la plaza Mayor a su izquierda del trayecto, en la elipse de la plaza, todavía no se había instalado de nuevo el quiosco de la música, que se desmontó para el acto de Coronación de la Virgen de la Fuencisla de 1916. En los bajos del Teatro Juan Bravo, en los dos arcos de la derecha con un toldo protector de la canícula veraniega estaba el café Juan Bravo, el primero en el cual Machado tenía una tertulia, según nos dice Grau.


     Cruzaba la plaza y empezaba con la calle Isabel la Católica, la primera parte de la llamada calle Real. A los pocos números a su izquierda pasaba por la zapatería de Demetrio Sáez, cuyo propietario era capaz de hacer zapatos a medida y además tenía precios económicos. Y es que Machado tenía los pies planos y por ello tenía  "un andar vacilante que parecía originado por algún padecimiento de los pies" (Grau),  o como dice Cobos  un "vacilante andar, con sus pies delicados, por el duro granito de las calles de Segovia, hechas para cascos de caballo".


     Después llegaba a la plaza del Corpus donde se apreciaban los tremendos estragos del pavoroso incendio del domingo 26 de diciembre de 1920. Por lo que deducimos que, como Machado se habría ido en las vacaciones de Navidad, se encontraría a su vuelta en enero, con el negruzco panorama. Limpiado parte del solar y construido ya el edificio del Banco Castellano con numeración de calle Juan Bravo Nº 2 se inauguraría en junio de 1925. En la imagen circa 1927 vemos que además se encontraba la central de Teléfonos, pero el solar anterior permanecería vacío durante toda la estancia de Machado en Segovia porque no se edificó hasta 1935. Después se ve un anuncio de lámparas Metal de la ferretería de Vicente Alcón Porcar del Nº 4. En frente, en el Nº 5, vemos el establecimiento de paños y telas de los hijos de Enrique Redondo Rubio.
 
Negativo propiedad de la Fundación Telefónica, positivado informáticamente
   
     Dos números más abajo, en la calle Juan Bravo Nº 6 se encontraba el famoso café La Unión regentado por Lorenzo Unceta Gutiérrez, donde Machado, según Grau, acudía diariamente por la tarde y en el que se mantuvo durante más tiempo en una tertulia. En ésta, según Cobos, creada en 1916, explica que "la función creadora se le debe atribuir a Juan José Llovet, poeta, y bueno, que se nos perdió, para la poesía y para la vida, por tierras de América. Fue el elemento catalizador. Y sabemos que del grupo inicial formaron parte Zambrano, con carácter patriarcal, Quintanilla, Otero, Carral...Surgen inmediatamente los nombres de Juanito (Juan Francisco) Cáceres Muñoz, Marceliano Álvarez Cerón, Antonio Ybot León". Es decir, una serie de jóvenes nacidos entre 1893 y 1900, a los que se unirían otros como, el más joven todavía, Grau y junto con ellos, de una generación anterior,  Blas J. Zambrano y, nada más llegar, el poeta profesor Antonio Machado. A todos ellos hay que añadir un abogado nacido en 1888, Julián Mª Otero Rubial, compañero de Machado en la Universidad Popular Segoviana entre 1925 y 1928. Al fallecer Otero en febrero de 1930, Machado hará un escrito homenaje "En la muerte de Julián Otero" que se publicará, a primeros de marzo, en el periódico Heraldo Segoviano de Carlos Martín Crespo.


    Poco después, en el Nº 12, se encontraba desde 1922 Casa Ridruejo que estaba regentado por los tíos carnales de Dionisio Ridruejo Jiménez de modo que ello facilitó que su sobrino viniese interno a Segovia. Es muy probable que Machado comprase allí sus grandes abrigos. Como ya sabemos de otro estudio don Antonio examinó de forma libre a Dionisio en el curso 1922-1923 de Lengua Castellana, Gramática y le puso Sobresaliente como pudimos comprobar en su expediente.


     Avanzando se llegaba a un edificio saliente en el cual estaba la ferretería Arana, en Nº 14 y Nº 16, traspasada a Fermín Rodriguez y el Nº 18 frente a la cárcel antigua. En la imagen de 1930 podemos ver justamente la puerta de acceso a la casa del Nº 18 en el cual había un almacén de curtidos, regentado, desde 1925, por Eladio Martín García y la sastrería de Miguel Sanz en el primer piso según podemos leer en el balcón. Este edificio desapareció al hacer una alineación que comenzó en 1941 y los actuales edificios se contruyeron entre 1943 y 1945.


    Justo a continuación, en Juan Bravo Nº 20, estaba la papelería Alonso en la cual el catedrático poeta podía comprar cuadernos, plumas, estilográficas, tinta y todos los objetos para sus escritos. El establecimiento era propiedad de José Alonso Velasco y se mantuvo después de irse Machado de Segovia.


     Después, se encontraba con el establecimiento de Cristobal Alcón Porcar (Nº 24) hasta que en 1930 se lo traspasa a Francisco Román López, Givaja (Nº 26) y los edificios finalizaban en el Nº 28 con la calle de la Puerta de la Luna. Seguía después, frente a la iglesia de San Martín, con varios establecimientos Fábrica de jabones La Fuencisla Nº 32 y en el Nº 36 el sucesor de la fábrica de muebles Casa Sessé.


     Ya en torno a la plaza de Medina del Campo con las esfinges (llamadas popularmente Sirenas) se encontraba en el Nº 38 de la calle Juan Bravo La Garza Real Zapatería y en el Nº 40 el encuadernador Faustino Álvarez Miguel en la parte izquierda de la casa del siglo XV.



     Acabando con ese tramo, la casa del Siglo XV (Nº 42) frente a la estatua de Juan Bravo realizada por Aniceto Marinas e inaugurada en 1922, aunque se había hecho el acto de la primera piedra en 1921 con la asistencia de Alfonso XIII. Como podemos ver en la imagen, todavía se mantenían las antiguas farolas del proyecto de reforma de la plaza de Bellver instaladas junto con las esfinges en 1852, pero que se retiraron después de la guerra civil.


      Antes de terminar esta primera parte con la plaza de Medina del Campo se encontraba la Imprenta y Librería de Mauro Lozano en Nº 44 y 46 habiendo tomado el traspaso de Antonio San Martín. Es decir, en este primer tramo analizado de la calle Real don Antonio disponía de dos imprentas-librería-papelerías (donde compraba muchos libros), un encuadernador y dos zapaterías para comprar los grandes botines que usaba, que según Cobos, provocaba que sus alumnos bachilleres le apodaran Charlot.


Continuará
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
      Esta entrada se la dedico a mi compañero de claustro Demetrio, cómplice literario, y a Luz una viejecita amiga de mi padre que vivió casi toda su vida en un último piso de una casa enfrente de la pensión de Machado hasta los ochenta y que seguro se cruzó con el poeta, sin saberlo, en alguna ocasión y al señor Plácido, padrino de mi padre, que también vería a Machado desde su tienda.
       Todo ha sido posible gracias a:
Plano de Segovia. Editado circa 1920. No consta autor, ni fecha, de mi colección.
Padrones municipales de Segovia de 1922 y 1925 del Archivo Municipal de Segovia.
Programas de Fiestas de 1922, 1925 y 1933 del Archivo Municipal de Segovia.
Negativo fotográfico catalogado como RN-3106_1 de la Fundación Telefónica.
Antonio Machado en Segovia por Mariano Grau [26/7/1951]. Estudios Segovianos, Tomo IV, Nº 11, pp. 359-368. Instituto Diego de Colmenares. Segovia, 1952.
El poeta Antonio Machado por Mariano Grau en Lecturas Segovianas. Publicaciones de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Segovia. Imp. "El Adelantado". Segovia, 1958.
Humor y pensamiento de Antonio Machado en la metafísica poética por Pablo de Andrés Cobos. Ínsula. Madrid, 1963.
Antonio Machado y Mariano Quintanilla por Pablo de Andrés Cobos. Estudios Segovianos, Tomo XXII, Nº 64, pp. 61-81. Instituto Diego de Colmenares. Segovia, 1970.
Segovia y Machado por José Tudela. Estudios Segovianos, Tomo XXII, Nº 65-66, pp. 261-274. Instituto Diego de Colmenares. Segovia, 1970.
Antonio Machado en Segovia: vida y obra por Pablo de Andrés Cobos. Ínsula. Madrid, 1973.
Bajo el chopo dorado de Julián Mª Otero. Introducción, notas y edición por Francisco Otero Martín. Segovia, 1990.
Las facilidades de Isabel del Archivo Municipal de Segovia, junto a su aliento y total colaboración para la divulgación de cómo era la Segovia antigua.
Mi colección de fotos, postales antiguas, folletos antiguos de Segovia de los últimos 20 años.