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sábado, 14 de septiembre de 2024

LA DEMOLICIÓN DEL CONVENTO DE SAN AGUSTÍN DE SEGOVIA (1909-1929)

     Continuamos con la entrada anterior sobre la iglesia de San Agustín, pero ahora cronológicamente llega la demolición de la iglesia y de la parte conventual de San Agustín, que se realizó principalmente entre 1909 y 1918. Sin embargo, ya en 1905 hubo algunos hundimientos involuntarios lo que supuso hacer una declaración de ruina por parte del arquitecto municipal Joaquín Odriozola.

      Comenzamos observando una imagen realizada por Pelayo Artigas, en 1909, desde la propia torre de San Juan de los Caballeros mostrando los derribos de las cubiertas de la iglesia y de toda la parte conventual, de modo que a la derecha se aprecia una chimenea, que muy probablemente llegaba desde la cocina del convento. En los viajes por la provincia de Segovia, organizados por profesores del Instituto y de la Universidad que residían en Segovia, entre otros Pelayo Artigas y Juan Zuloaga debieron conocerse más personalmente. Por ello, muy probablemente, empezaron una gran amistad en el viaje para ver en Ayllón el eclipse total de Sol de agosto de 1905. Eso supondría que Pelayo también conociese a Daniel Zuloaga y ambos tenían una afición común, sus conocimientos fotográficos para utilizarlos en la valoración del patrimonio cultural de Segovia.

     Continuamos con una de las fotos realizadas por Daniel Zuloaga, aunque su intención sería mostrar la iglesia de San Juan de los Caballeros como taller de trabajo y sus hornos echando humo para la elaboración de sus 'cacharros' cerámicos (funcionando desde 1908). En el fondo, a la izquierda de la iglesia, vemos que ya se han demolido al menos la cubierta del ábside de la iglesia de San Agustín, manteniéndose los ocho adornos de prisma con bola de granito, que delimitaban su perímetro entre el ábside y el crucero. Además, también han demolido la cubierta de  las celdas de los monjes y sólo se ve al final un saliente, que era la chimenea de la cocina del convento. 

     Entre 1910 y 1914 con las cubiertas eliminadas se van haciendo otras demoliciones de algunos muros. Para la obra de demolición los ingenieros del ejército hicieron, en junio de 1912, un plano de la planta del convento y de la iglesia de San Agustín. En esa planta hemos señalado, los tramos de las capillas laterales de la iglesia, en la izquierda (azul) y en la derecha (morado). La demolición se va a hacer comenzando por la nave derecha, como luego podremos comprobar.

    Sin embargo, será principalmente en 1915, cuando se hará la demolición de la portada de la iglesia. Hacia marzo de 1915 es cuando al ir haciendo la demolición de la fachada principal la escultura de San Agustín se cayó al suelo y se rompió en dos trozos, que Daniel Zuloaga captó con su cámara. Por ello, Daniel Zuloaga hizo un escrito público de queja, publicado en la sección, Tribuna Libre, titulado ¡POBRE SAN AGUSTÍN! en el periódico Diario de Avisos del 28 de mayo de 1915 que entre otras cosas decía:    

    "...El sino de este hermosísimo templo ha sido desdichado; no parece sino que alguien (como se dice) le ha echado mal de ojo; principió el derribo por la fachada principal, cuya puerta era de un barroco típico, bello y soberbio, con escudos admirables, de bien compuestos y ejecutados. En una hornacina, una estatua del Santo, decorativamente esculpida que al desmontarla la decapitaron...Suspendieron la destrucción indudablemente para que los extranjeros se enteraran del cariño que se tiene en Segovia á sus monumentos; y hace varios meses, la emprenden destruyendo, de tal manera, que la piedra tan bien labrada cae hecha harina; las ricas labores de multitud de escudos, las bolas que coronaban el edificio, que podían haberse utilizado para las balaustradas del puente del Salón, ó la plaza del Alcázar, á pesar de ser de duro granito caen despedazadas como si fueran destruidas por los famosos cañones que destruyeron la Catedral de Reims.

    Cualquier museo hubiera tenido á gala conservar esas piedras labradas como recuerdo de esta arquitectura, aunque de época reciente, interesantísima para la historia de la Arquitectura; el señor marqués de Montesa, gobernador actual de Segovia (muy distinguido amigo mío), me decía que la Comisión de Monumentos había pedido se conservara un gran escudo que aún queda por derribar [pensamos que se refiere al de la izquierda del crucero y que se puede ver actualmente]...Y hablando de la Comisión de Monumentos, siento decirlo por esta entidad la única que podía haber evitado el derribo de San Agustín, que es la culpable de ello; ni la más ligera propuesta que yo sepa ha hecho para evitar semejante vergüenza para Segovia...

    ¿A qué obedece la destrucción de sus edificios en buen estado, donde podría haberse hecho un Museo por su emplazamiento y por su gran nave?..." 

    La Comisión Provincial de Monumentos Artísticos, tenía como Presidente oficial al gobernador civil, pero el Vicepresidente, y presidente de hecho, era un miembro correspondiente de la Real Academia de la Historia y en ese momento era Carlos de Lecea y García. El secretario de la comisión, otro correspondiente, era el padre Benito de Frutos Gómez junto con otros miembros y los arquitectos municipal y provincial. Daniel Zuloaga no sabía que en 1909 Lecea había presentado su dimisión porque consideraba que todos los esfuerzos de la Comisión no eran escuchados ni atendidos. Desde 1899 el esfuerzo de la comisión fue conseguir dinero para la reparación de la torre de San Esteban y su problemática posterior con el vendaval de 1907 provocó que la restauración de la torre se dilatase en el tiempo hasta 1929. Por ello la comisión, durante los primeros diez años del siglo XX, se centró en llamar la atención de gasto público necesario para la restauración de la torre de San Esteban, del monasterio de El Parral y de la iglesia de la Veracruz, y dejó un poco al margen la iglesia del convento de San Agustín, propiedad del Ministerio de la Guerra.

     Unos días después, Daniel Zuloaga (Ceramista) escribe otro artículo SOBRE RUINAS Para 'un profano en Arte' en el Diario de Avisos del 7 de junio de 1915:

"...En primer lugar rechazo plena y virilmente la acusación de que el origen de las ruinas del templo de San Agustín, sea voluntad Soberna. Yo Republicano de corazón, no puedo ser sospechoso al afirmar que el joven soberano que supo detener a tiempo el crimen artístico que se estaba cometiendo con la restauración de la Alhambra de Granada, sea el mismo que ha dispuesto la demolición de San Agustín...

     Yo sé que al final de esta campaña de arte, sin interés personal alguno, me espera lo que a todo Redentor, el Calvario, el Gólgota, con su cruz y su corona de espinas y hasta es fácil que no me falte la lanzada de gracia de algún Longinos; pero no me importa; nada temo, antes al contrario parodiando las palabras de Isaias Jesus, de aquel hombre que se adelantó veinte siglos a su época, de aquel que fue de Bethania a Jerusalén, derramando la luz de la verdad sobre las almas, os diré a todos...el que con la mano puesta sobre su corazón, se atreva a decir que la demolición de San Agustín, no es un crimen artístico, e innecesario...que me tire la primera piedra..."

     Después de dejar caer la imagen de San Agustín podemos comprobar que en la demolición hubo poco cuidado y se dejaban caer piedras del frontispicio de la fachada, que fueron dañando la cornisa que había por debajo de la hornacina del santo. Vemos como la nave de la derecha ya se ha demolido hasta la parte superior de la ventana de una especie de desván que había junto al Coro.


     En la imagen anterior, podemos apreciar el escudo de los Agustinos culminando el frontón de la portada. En el cual hay un escudo episcopal, con sombrero de Obispo junto con un corazón atravesado por la flecha y la pluma.


     Además, hemos hecho un detalle para mostrar cómo se había cambiado la cubierta original de la nave de la izquierda de la iglesia atravesando el escudo. Posteriormente, muy probablemente por parte del Ejército, se cambió la inclinación y se realizó una especie de desván con una terraza.


     Hacia 1916 Daniel Zuloaga Boneta (1852-1921) o bien su hijo Juan, realizó al menos una fotografía, que nos muestra perfectamente cómo se fue haciendo el derrumbe. En ella podemos ver lo que sería la capilla 3 de la nave de la derecha, picados los correspondientes contrafuertes, junto con el arco 2, con menos altura, para la situación del suelo del Coro.


     Podemos apreciar que ya está eliminada la portada de la iglesia, y observamos justo al lado, la nave de la Capilla de La Concepción apreciando la espadaña por encima de la puerta de la calle de San Agustín, que estaba en frente a la casa del Hidalgo (hoy Museo Rodera Robles). Lo que fue la nave principal de la iglesia de San Agustín se usaba de almacén acumulador de los escombros de piedras para irlos retirando con carros y tartanas.

      En 1917 podemos ver, mientras se está construyendo el teatro Juan Bravo, al fondo la nave principal de la iglesia de San Agustín, en la cual apreciamos completos los tramos 4 y 5 aunque ya no hay cubierta, se distingue el arco apuntado de la nave principal. En cambio, los tramos 1, 2 y 3 ya están demolidos e incluso quedando sólo los arcos de la nave izquierda y de la derecha de las capillas.


      Además, vemos que Daniel Zuloaga, en su taller de la iglesia de San Juan de los Caballeros, ya había tenido el accidental derribo de la cubierta de la torre de la iglesia. Poco después, podemos ver una panorámica desde las lomas por encima del convento de San Vicente con dos arcos apuntados y observamos toda la muralla por debajo de la huerta y del paseo del Obispo. En la imagen comprobamos la imponente monumentalidad del convento de San Agustín respecto al convento de Santa Cruz.


      Es en ese momento cuando consideramos que realizará en el segundo semestre de 1917 varias fotografías desde la calle de San Agustín. En ellas Daniel mostrará cómo van quedando los arcos de la nave principal y los arcos apuntados de la bóveda del crucero. En la primera hemos señalado en morado los arcos 4 y 5 de la nave de la derecha con la nave principal, y apreciamos perfectamente cómo se mantienen todavía los arcos de medio punto 1 y 2 un poco por encima del muro de la nave, que se utiliza del cierre del solar. Todavía está el arco apuntado de la nave principal de la bóveda del crucero y el arco de la izquierda.


     Vemos que se han plantado los árboles centenarios actuales para conformar el jardín de la plazuela de San Agustín y hay una loma hacia la calle de la Parra, que también sería de arena. El mirador actual con la barandilla todavía no se realizaría hasta los años 40.


     Según va transcurriendo el verano Daniel debió hacer una tercera instantánea, con la cual realizó la siguiente acuarela (expuesta en el Museo Zuloaga de Segovia). Ya está eliminado el arco apuntado de la bóveda del crucero, pero no han desmochado todavía todo el muro lateral derecho, donde se ven bien los ojos de la ventana gótica.


      Poco después se va desmochando, respetando el escudo de la izquierda que había pedido la Comisión de Monumentos, pero justo hasta el borde superior. En la parte derecha se ha desmochado todo el muro del crucero, que es lo que queda actualmente.


     Sobre el plano del Archivo Militar de Ávila, hemos hecho una hipótesis de cómo estaba el derrumbe a finales de 1917 teniendo en cuenta todas las imágenes conseguidas.


      Poco después, el paisajista Emilio García Martínez (1880-1972) firmó su cuadro en 1918 que estaría realizado desde la torre de San Juan de los Caballeros, con una iconografía totalmente similar a la foto anterior de Pelayo Artigas.


     Pensamos que en 1919 ya no quedaba ningún arco de las tres naves y el solar se ha limpiado, pero hacia 1920 comprobamos que el muro externo de la iglesia se aprovechaba de cierre del solar y es utilizado por el Ministerio de la Guerra. En la parte interior derecha se hace una especie de almacén que aprovecharían de algún modo (el Gobierno Militar de Segovia se encontraba muy cerca, en la casa del Conde de Alpuente, en el Nº1 de la plaza de su mismo nombre). Al fondo observamos como el muro de la parte derecha del crucero tiene hecho el desmochado como se puede ver en la actualidad en lo que es el Monumento de los Caídos.


      Durante toda la década de 1920 se mantendrá el solar triangular de lo que que era una parte de la plazuela de san Agustín, hasta la calle de San Agustín. En la imagen vemos que como había hierba se utilizaba de secadero de ropas.

       Sobre la planta del archivo militar de Ávila hemos hecho la hipótesis de cómo sería el solar del convento y en particular limpiado el solar que correspondía a la monumental iglesia.


    Durante toda la década de 1920 se mantendría en manos del Ministerio de la Guerra. Hacia 1925 desde las lomas del cementerioa Otto Wunderlich (1886-1975) hizo una fotografía. De esa imagen hemos extraído un detalle de cómo se veían entonces todas la ruinas. En primer plano se puede ver la casa del marqués de Lozoya.


     A finales del verano de 1929 Robert Gillon (1884-1972) hizo la siguiente fotografía de cómo quedaban los restos de la iglesia del convento de San Agustín definitivamente. Tan sólo quedaba el gran escudo del fundador Antonio de Guevara en el muro de la izquierda del crucero, que actualmente se puede ver. En el muro de la derecha del crucero todo se desmochó y se dejó parte del arco 5 como se puede apreciar actualmente.


     En 1929 el Ministerio de la Guerra cede el solar de lo que fue el convento de San Agustín al Ministerio de Hacienda. El Ayuntamiento de Segovia presentó varios usos para poder hacer la petición del solar. En 1930 planteó la posibilidad de la creación de un mercado municipal, en la zona de lo que fue la iglesia, dentro de la zona amurallada.

       Hacia el final del verano de 1932 el Ayuntamiento conseguirá el solar correspondiente a la iglesia y lo unirá al solar triangular, de propiedad municipal, y el resto se mantendría en propiedad del Ministerio de Hacienda. De nuevo en las sesiones municipales se hicieron nuevas propuestas. En 1935 se planteó la posibilidad de hacer un edificio de nueva planta para la casa cuartel de la Guardia Civil, que se encontraba en la Casa de la Química y otros pequeños cuarteles entre el caserío de la ciudad, pero no llegó a término. Como bien sabemos todos los segovianos será en 1942 cuando Francisco Fernández-Vega hizo el proyecto del Hospital Policlínico mediante la Obra Social 18 de Julio y se mantiene en la actualidad.
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      Esta entrada se la dedico a todos los que jugábamos en esas ruinas viviendo en los bloques del Taray, en especial a los ya desaparecidos Alberto y Mariano. Además, a mis amigos coleccionistas y recuperadores de imágenes de la Segovia antigua y desaparecida Juan Fran Sáez, Juan Pedro Velasco, Juanjo Bueno y Aku Estebaranz.
       Todo ello ha sido posible gracias a:
La fotografía de Pelayo Artigas Corominas del Archivo Zuloaga del Museo de Segovia con fecha de 1909.
Las fotografías sobre las ruinas del convento de San Agustín realizadas por Daniel Zuloaga (1852-1921) o su hijo Juan del Archivo Zuloaga del Museo de Segovia. Todas las anteriores gracias a la intensa búsqueda y amabilidad de la bibliotearia del Museo, Belén.
La acuarela de Daniel Zuloaga sobre las ruinas del convento de San Agustín expuesta en el Museo Zuloaga.
El cuadro de Emilio García Martínez (1880-1972) cuya imagen me facilitó Juan Manuel Santamaría.
Las fotos de autores desconocidos de la colección de Juan Francisco Sáez Pajares.
La foto de The Conway Library, London.
Los Unturbe, fotógrafos de Segovia por Acu Estebaranz. Junta de Castilla y León, Consejería de Educación y Cultura. Valladolid, 2000. [Gracias a la familia de Berta Unturbe González]
Diario de Avisos periódico del miércoles 27 de septiembre de 1905. Año VII, NÚM. 2288.
Diario de Avisos periódico del lunes 25 de enero de 1908. Año X, NÚM. 2930.
Diario de Avisos periódico del miércoles 26 de mayo de 1915. Año XVII, NÚM. 4945.
Diario de Avisos periódico del lunes 7 de junio de 1915. Año XVII, NÚM. 4954.
El Adelantado de Segovia diario del miércoles 18 de agosto de 1909. Año X, NÚM. 1771.
El Adelantado de Segovia diario del jueves 11 de marzo de 1909. Año XV, NÚM. 3750.
El Adelantado de Segovia diario del viernes 11 de noviembre de 1927. Año XXVII, NÚM. 5855.
El Adelantado de Segovia diario del sábado 15 de noviembre de 1930. Año XXX, NÚM. 7653.
El Adelantado de Segovia diario del jueves 11 de febrero de 1932. Año XXXII, NÚM. 8027.
El Adelantado de Segovia diario del sábado 20 de julio de 1935. Año XXXV, NÚM. 9825.
El Convento de San Agustín de Segovia por María Jesús Callejo Delgado en la revista Ciudad de Dios: Revista agustiniana, Vol. 222, Nº2, 2009
Segovia y la Artillería (II) por Diego Quirós Montero en El Adelantado de Segovia, periódico del domingo 25 de mayo de 2014. Año CXII, Número 35950. 
Del Claustro al Estado: El patrimonio desamortizado al convento San Agustín de Segovia (1555-1835) por Ismael Arevalillo García, OSA. De Arh. Ag. 105 (2021) pp.105-120
Mi colección de fotos antiguas, guías y folletos de Segovia acumulados en los últimos veintiséis años. 

miércoles, 16 de agosto de 2023

LA IGLESIA DEL CONVENTO DE SAN AGUSTÍN DE SEGOVIA (1839-1908)

      Después de haber vivido durante más de treinta y cinco años junto a las ruinas del convento de San Agustín de Segovia y haber recopilado todas las imágenes conseguidas en los últimos veinticinco podemos saber bien, a día de hoy, cómo era su imponente iglesia. Además, mostraremos cómo se fue haciendo su demolición, para ver durante mis primeros treinta y siete años de vida todas esas ruinas, que no sabía cómo eran originalmente.

     Siguiendo los escritos de Antonio Ponz Piquer (1725-1792) en su Viage de España, primera edición de 1786, dice respecto a la iglesia del convento de los Agustinos de Segovia "es grande, y espaciosa donde todavía ha quedado algún retablo de arreglada arquitectura, y lo es el de Santa Agueda, con sus quatro columnas de órden dórico. En el colateral del lado de la Epístola se ve una copia bastante diligente del célebre cuadro de Guido Rheni, que representa la Asuncion, con gran acompañamiento de Angeles en coros de música; y en una capilla de este mismo lado se encuentra una pintura, que me pareció bien, y representa á Santa Catarina Mártir. Hay seis nichos sepulcrales en el crucero, adornados de buena arquitectura"

     El convento de los Agustinos de Segovia fue suprimido según el Real Decreto del 11 de octubre de 1835 y muy probablemente ya había pasado, a manos del estado, con todos sus bienes por Real Decreto del 25 de julio de 1835. La imagen más antigua de la iglesia del convento la podemos datar en 1839 realizada detalladamente por Avrial tomando el edificio desde la calle Taray. Aunque el dibujo se editó en un libro en 1843, José María Avrial no pasó de 1840 como profesor y director de la Escuela de Bellas Artes de Segovia.


     Como podemos comprobar muestra una iglesia cuya planta sería una gran cruz latina y se ven ahí cuatro contrafuertes para la nave principal que nos marcarían que tenía cinco tramos para capillas laterales. En el ábside, según el dibujo, habría cinco grandes ventanas para entrada de luz, pero como comprobaremos en imágenes reales, debería haber sólo cuatro ya que en la central estaría apoyado el altar mayor

     Necesariamente el profesor Avrial también lo representa desde otra perspetiva, los Altos del Parral. Para mostrarlo hemos hecho un detalle, comprobando la simetría del crucero, con la ventana gótica (que tendría cuatro ojos y uno por encima), y cómo sería la nave lateral izquierda con referencia a la fachada principal. Ahora, se aprecia también el edificio correspondiente a las celdas de los monjes del convento y una cierta asimetría en la nave, que no sabemos actualmente que sentido tendría, ni tampoco cómo sería la nave lateral izquierda completa. 

     
      Poco después, como bien nacional, la iglesia y el convento de San Agustín pasaron cedidos al Ministerio de la Guerra. Según Diego Quirós Montero a partir del 19 de noviembre de 1845 la Brigada de Artillería de Montaña se instaló en el cuartel de San Agustín y allí permaneció hasta 1854. Todo el Cuartel de San Agustín se mantendrá durante unos 30 años en el arma de Artillería, encontrándose después el 2º Regimiento de Montaña y desde 1876 se mantuvo en el arma de Infantería, con el Batallón de Depósito y Reserva. Entre 1876 y 1904 sus oficinas se utilizaron para gestionar en la Zona de Segovia, las licencias de los soldados del servicio militar obligatorio, los sorteos públicos para Ultramar (Cuba, Puerto Rico y Filipinas) y todos las llamadas públicas a los soldados que no se habían presentado en los reemplazos correspondientes. Suponemos que la gran nave de la iglesia, en el siglo XIX, se utilizaría de almacén militar, como otras iglesias segovianas, como la de San Nicolás o la de San Quirce. A partir de finales de 1905 se va a instalar la Comandancia de Ingenieros del Ejército de Segovia, en cuanto empiezan sus demoliciones.

      En 1809 hubo un incendio en el convento de Santa Cruz la Real y se destruyó su Altar Mayor y como la iglesia de San Agustín se utilizaba principalmente de almacén, por parte del Ejército, en 1868 su Altar Mayor se trasladó a Santa Cruz, que es donde se mantiene actualmente, en 2023. De un viaje de un fotógrafo alemán podemos ver cómo era el retablo cuando llevaba instalado en Santa Cruz más de sesenta años y evidentemente se habían colocado en él imágenes relacionadas con las monjas que se encargaban de los Establecimientos de Beneficencia y Hospicio Provincial.


     Desde una situación muy diferente, por encima de la plaza de toros, Jean Laurent, tomó hacia 1871, una panorámica de la ciudad. Hemos hecho un detalle y encuadrado la iglesia para mostrar mejor su nave lateral derecha, comprobando que se ven tres ventanales en la nave principal, además del ventanal del crucero (con dos pares de ojos y uno superior). Si nos fijamos bien, las techumbres de la nave lateral de la derecha correspondientes a los tramos 3, 4 y 5 no están porque se hundieron en 1864. Además, podemos ver el lateral del imponente ábside con medio decágono, que es lo único que queda actualmente, pero todo desmochado unos diez metros de longitud.


     Las anteriores imágenes nos van dando una idea de la grandiosidad de la cabecera de la iglesia, pero ahora veamos el detalle de otra fotografía panorámica de Laurent, tomada desde Las Nieves, y así lo podemos comparar mejor con la Catedral en una foto real. A la derecha, vemos lo que eran las celdas de los monjes, es decir, el propio convento, que son las ruinas en las que jugábamos todos los chicos y chicas de los bloques del Taray, más que en el propio jardín de los bloques.

    
     En otra fotografia del amigo Juan Francisco Sáez podemos ver toda la arboleda que había adosada a la muralla. Hemos datado la imagen circa 1885, se puede apreciar el mismo edificio que en la foto de Laurent y un poco el reverso de la espadaña de la nave derecha de la iglesia, aunque tendremos que esperar para ver con precisión la fachada principal de la iglesia con la impresionante foto de Tirso Unturbe.


     En febrero de 1893 hubo un hundimiento de la cubierta que estaba sobre el crucero donde había una elegante veleta, que se puede apreciar en el dibujo de Avrial y que se quedó medio destrozada. Eso provocó que se hiciese una cubierta provisional para no facilitar nuevos hundimientos. Hacia 1898, un fotógrafo francés, hace una instantánea del ábside y el convento de San Agustín desde los solares por delante de la iglesia de San Juan de los Caballeros. En la imagen se muestran los grandes árboles que había en la calle del Taray, y que también aparecen en la imagen del profesor Avrial. Además, a la derecha los árboles que ya nos situarían en el paseo del Obispo.

   

     En 1901 el arquitecto municipal Joaquín Odriozola hace su detallado plano de la ciudad y podemos ver cómo estaba en planta la iglesia, el convento y su gran huerta que llegaba hasta la calle del Taray. Además, hemos señalado el solar contiguo que correspondería a los actuales jardines hasta la calle de la Parra. Sin embargo, este plano nos hizo considerar que la capilla de La Concepción ocupaba más terreno de lo que ocupaba realmente y parece ser que era más bien pequeña y ese terreno debía corresponder al propio convento de San Agustín. 

  

    A partir de septiembre de 1905 hay una declaración de ruina y se empiezan a hacer las primeras demoliciones por parte de los ingenieros del Ejército. Pensamos que las primeras demoliciones se hicieron en la parte que se apoyaba en la nave izquierda de la iglesia, donde tenía que estar el acceso de los monjes del convento a la iglesia. Todo ello nos hizo datar la impresionante foto realizada por Tirso Unturbe circa 1906.


      La foto estaría tomada desde la parte izquierda de la portada del actual Museo Rodera Robles. Como podemos apreciar se ve la acera de la calle de San Agustín y podemos entender el triángulo que se formaba entre la portada de la iglesia, la calle de San Agustín y la capilla de La Concepción que tan bien refleja el arquitecto Odriozola en su plano. Este solar triangular junto con el terreno contiguo hacia la calle de la Parra, popularmente se conocía como la plazuela de San Agustín. En la portada se ven escudos nobiliarios de su fundador y en una hornacina una imagen de San Agustín.

     Si nos fijamos, en la nave de la derecha de la iglesia hay una gran grieta que en la parte baja la han enyesado, las ventanas de las naves laterales tienen marcas de lo que serían las rejas que hubiese. En la parte baja de la nave de la izquierda hay un revoco claro, que suponemos que lo haría el Ejército para diferenciar bien la parte de oficinas del Cuartel de San Agustín y también la propia ventana que se ve. Además, podemos observar que hay varios montones de piedras organizados, lo que nos hace suponer que ya se están haciendo ciertos derribos. Vemos que en ambas espadañas no hay ninguna campana, pero muy probablemente, según un inventario de un fraile agustino de marzo de 1821, en la torre había una campana (parece verse una muesca en el hueco superior de la espadaña izquierda) y un esquiloncillo.

    Según Félix Gila y Fidalgo, en su guía de 1906, la capilla de La Concepción "Está sostenido el culto por una cofradía: sus altares son barrocos y tiene cuadros adosados á las paredes. No tiene importancia artística, ni histórica"

     Desde la Catedral el profesor auxiliar de matemáticas del Instituto, Pelayo Artigas, realiza una impresionante fotografía circa 1907 en la cual podemos apreciar en la lejanía la parte conventual de las celdas de los monjes y la portada de la iglesia. Vemos que está la arcada de alineación en la plaza Mayor (plaza de la Constitución) y el hueco del derribo del Mesón Grande y casas contiguas. Además, en la otra arcada frente al Ayuntamiento y cerca de la iglesia de San Miguel, la fonda de La Burgalesa


     Con una imagen por satélite actual, hemos hecho unas aclaraciones de cómo estaba situado el convento y su iglesia con respecto a la actualidad. Hemos detallado las celdas de los monjes, una zona conventual, la planta de la iglesia y por debajo la huerta del convento hasta la calle del Taray. Además, hemos señalado la capilla de La Concepción.

 

    Sin embargo, toda esta aclaración actual sólo ha sido posible utilizando documentación variada y un detalle, a gran resolución, de la foto anterior de Pelayo Artigas, donde hemos podido encajar algunas piezas del puzle. 


     Como podemos apreciar la cubierta de la iglesia está a medias probablemente en el ábside y el crucero, es decir, se aprecia la cubierta provisional después del hundimiento de 1893. Se distinguen todos los prismas decorativos con sus bolas de granito señalando el perímetro eclesiástico. En la parte de la nave principal, más cercana al crucero, también hay media cubierta y se mantiene todavía la cubierta que llega hasta la fachada principal. Podemos apreciar, por la cubierta, que la parte conventual llegaba hasta la iglesia, de modo que suponemos que por esa nave accedían los monjes a su iglesia, es decir por el tramo (1 ó 2) de los cinco que señalamos numerados en la planta de la foto por satélite. Con recuadros azules, hemos indicado, a la izquierda el escudo nobiliario del fundador Antonio de Guevara y Tapia, que actualmente se conserva y a la derecha el campanario de la capilla de La Concepción, que debió desaparecer en la década de 1960, junto con su nave perimetrada en rojo.

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       Esta entrada se la dedico a todos los que jugábamos en esas ruinas viviendo en los bloques del Taray, en especial a los ya desaparecidos Alberto y Mariano. Además, a mis amigos coleccionistas y recuperadores de imágenes de la Segovia desaparecida Juan Fran, Juan Pedro Velasco, Juanjo Bueno y Aku Estebaranz.
       Todo ello ha sido posible gracias a:
Las fotografías sobre Segovia de Jean Laurent y Minier (1816-1886) de la Biblioteca Nacional de España.
Segovia Pintoresca por José María Avrial y Flores. Coordinación y notas por José Miguel Merino de Cáceres. Edición realizada por la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce con la colaboración de la Junta de Castilla y León, Diputación provincial de Segovia y Plan de Excelencia Turística del Ayuntamiento de Segovia. Segovia, 2002.
Gaceta de Madrid, Nº 211 del miércoles 29 de julio de 1835 [R.D. de 25/7/1835]
Gaceta de Madrid, Nº  292 del viernes 14 de octubre de 1835 [R.D. de 11/10/1835]
Gaceta de Madrid, Nº 444 del jueves 10 de marzo de 1836 [R.D. de 9/3/1836]
La foto de Pelayo Artigas de la colección de Juan José Bueno.
La foto de autor desconocido de la colección de Juan Francisco Sáez.
La foto de autor francés procedente de la Biblioteca Nacional de Francia.
La imagen por satélite de Google Earth de 2022.
Las fotos del Archivo Zuloaga y la colaboración de Belén, su bibliotecaria, del Museo Provincial de Segovia.
La Legalidad  Segovia, semanario del jueves 9 de febrero de 1893. Año VI-2ª época, NÚM. 266.
Plano de Segovia realizado por Joaquín Odriozola Grimaud en 1901.
Diario de Avisos periódico del miércoles 27 de septiembre de 1905. Año VII, NÚM. 2288.
Diario de Avisos periódico del lunes 7 de junio de 1915. Año XVII, NÚM. 4954.
Guía y plano de Segovia por Félix Gila y Fidalgo. Imprenta del Diario de Avisos. Segovia, 1906. Edición facsímil de la Editorial Maxtor. Valladolid, 2010. 
Segovia Monumental, Los Monumentos Cardinales de España XV por Isabel de Ceballos-Escalera. Editorial Plus Ultra. Madrid, 1953.
Los Unturbe, fotógrafos de Segovia por Acu Estebaranz. Junta de Castilla y León, Consejería de Educación y Cultura. Valladolid, 2000. [Gracias a la familia de Berta Unturbe González]
Segovia y la Artillería (II) por Diego Quirós Montero en El Adelantado de Segovia, periódico del domingo 25 de mayo de 2014. Año CXII, Número 35950. 
Del Claustro al Estado: El patrimonio desamortizado al convento San Agustín de Segovia (1555-1835) por Ismael Arevalillo García, OSA. De Arh. Ag. 105 (2021) pp.105-120
Mi colección de fotos antiguas, guías y folletos de Segovia acumulados en los últimos veinticinco años. 

viernes, 28 de agosto de 2020

EL FAROL y LA BOMBA de agosto de 1936 en EL ACUEDUCTO

      Después de haber realizado el estudio sobre los faroles engarzados a los pilares del Acueducto nos vamos a centrar ahora en el farol con más visibilidad que había en la zona oriental. Como ya comprobamos era el farol que estaba a menos altura de los siete localizados, pero además este farol tiene conexiones con nuestra guerra civil en lo que llamaríamos actualmente una fake news o en definitiva el uso de una fotografía para mostrar una noticia falsa.

      Sin duda, es el farol más antiguo de los que tenemos constancia fotográfica. Aparece en la foto que Charles Clifford (1820-1863) realiza en 1853 muy probablemente junto a un ayudante conocido en la fotografía segoviana del siglo XIX, Juan Pérez Galiano (1821-1897). El farol está en la famosa fotografía tomada desde la antigua calle de Gascos hacia el Acueducto.

Foto Propiedad de la Biblioteca Nacional de España

      A primera vista aunque es una imagen suficientemente grande no se aprecia fácilmente el farol del Acueducto e incluso con el estudio ya realizado es difícil adivinarlo. Sin embargo, con la ayuda de las nuevas tecnologías de programas de edición de imagen y gracias a la Biblioteca Nacional que ha hecho una impecable digitalización podemos aclarar y distinguir muchas cosas.


      Es curioso observar además el balcón con barandilla de madera que se ajustaría al Nº 7 de la calle Gascos y como en los números pares que comenzaban más cerca del Acueducto hay otro farol. Éste engarzado a una columna antigua no se ajusta a los ya estudiados si no muy probablemente a otros todavía más antiguos teniendo en cuenta el tipo de palomilla y el depósito del combustible. Quizás este otro tipo nos puede llevar a su instalación en las primeras décadas del siglo XIX o incluso antes.

     Pero continuemos con nuestro objetivo inicial que es aclarar durante cuánto tiempo permaneció ese farol en el Acueducto que suponemos instalado entre 1845 y 1852. Como bien sabemos corresponde a la pilastra en la cual estaba la hornacina con la figura de San Sebastián.


     Ahora claramente lo podemos ver con el siguiente detalle de la fotografía de Laurent en este caso digitalizada maravillosamente por el IPCE que nosotros fechamos realizada hacia 1873 y en la cual sí se puede apreciar mejor que es un farol reverbero. Si nos fijamos en las sombras de la palomilla sobre las piedras de granito corresponde al tipo de tres puntos de ajuste.


      En ese momento ya están demolidos los antiguos primeros números pares de la calle de Gascos y  está realizada en la ciudad la llamada carretera de Boceguillas (proyectada por Obras Públicas en 1860) con el muro de protección de Gascos que se mantuvo hasta 1960. Ya comprobamos en el estudio anterior que el otro farol, el del Azoguejo muy probablemente se quitó en 1880 al instalar allí la farola procedente de la plaza mayor, pero con demostración fotográfica antes de 1889. En cambio este farol se mantuvo mucho más, veinticinco años más.

     Podemos apreciar el farol que todavía se mantenía en una imagen treinta y cinco años después recién terminado el edificio del Parador del Acueducto hacia 1907. La imagen está realizada por Julio Duque en la época que edita sus propias postales para vender en su platería junto con objetos fotográficos y aparatos ópticos.


      Incluso más tarde se mantenía como vemos por la fototipia de Lucien Levy circa 1910, pero no duraría mucho más porque en fotos de 1917 ya no aparece.


     Suponemos que hacia 1915 se retira el farol aunque cumpliese su función de alumbrado público transformado a luz eléctrica que además suponía que algún cable estuviese entre las piedras del Acueducto. En esta operación no tuvieron demasiada maña y se ven grandes marcas de los enganches de la palomilla a las piedras del Acueducto. En 1930 podemos apreciar el poco cuidado con este detalle de una foto de Gabino Hernández Alsina justo en el momento que están haciendo la demolición de los muros de la iglesia de Santa Columba. A la derecha podemos ver el murete del talud de la calle Gascos protegido con un bolardo de granito marcando el giro para la posible subida por la calle de San Juan de los automóviles y los carruajes.


     Las marcas de engarce a la pilastra como ya explicamos se debían al cambio de palomilla hacia 1880 y que actualmente se distinguen perfectamente.
 
     Sin embargo el 18 de julio de 1936 surge la sublevación militar y Segovia se adhiere oficialmente junto al bando golpista a fecha 20 de julio de 1936 controlando el Gobierno civil, el Ayuntamiento y los establecimientos militares: la Academia de Artillería, el Regimiento de Artillería Ligero Nº 13 (cuartel de la Casa Grande) y la Escuela de Automovilismo.

      Entre el 22 de julio y el 31 de julio de 1936 hubo tres bombardeos de la aviación republicana con resultado de un muerto. No eran demasiado peligrosos y se consideraba que con refugiarse en las bodegas de las casas era suficiente, pero los bombardeos del primer fin de semana de agosto causaron dos muertos con la bomba que cayó en la calle Martínez Campos, junto a la Catedral, y al día siguiente un soldado muerto causado por las dos bombas que provocaron grandes desperfectos en la Academia de Artillería y otra en el Instituto.

     En el bombardeo del viernes 14 de agosto de 1936 según Juan de Contreras, Marqués de Lozoya se arrojaron unas 16 bombas que provocaron cinco muertos. "Cayó una de ellas al comienzo de la carretera de Boceguillas, delante del almacén de coloniales de don Claudio Moreno en cuyas inmediaciones había congregada mucha gente" que provocó la muerte de un falangista y un niño que venía a la capital montado en su borriquillo.

     Esta fotografía con fecha anotada del 8 de agosto de 1936 pretende reflejar las marcas que dejó la metralla al estallar la citada bomba en la pilastra del Acueducto, pero no hay otra que muestre el agujero que provocase la bomba en la carretera de Boceguillas.

Foto propiedad del Archivo de la Guerra Civil de la Biblioteca Nacional
   
     En el reverso podemos leer claramente el texto escrito "Segovia- impactos de la metralla roja en el famoso Acueducto romano. 8-8-36".


     Con el estudio realizado bien sabemos que esas marcas mostradas en la foto son causadas por la extracción, con poco cuidado, de la palomilla de dos puntos de ajuste que era la que se mantenía unos veinte años antes en esa pilastra del Acueducto. Hemos hecho un montaje fotográfico comparativo mostrando las fotos de 1930 y la de 1936 para demostrar que las marcas son exactamente las mismas.


     No sabemos quién realizó esa foto en plena guerra y tampoco sabemos si se publicaron en algún periódico o revista de la zona nacional, pero claramente en este caso intentaban dar una noticia falsa.
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    Esta entrada se la dedico a mi ex alumno Diego que después realizó el Bachillerato de Investigación y que al leer mis estudios sobre los faroles del Acueducto y ver las fotos del Archivo de la Guerra Civil me pedía mi opinión sobre la foto de 1936.
       Todo ha sido posible gracias a:
Las fotos antiguas digitalizadas por la Biblioteca Nacional.
La Visita de Charles Clifford a Segovia del blog del amigo Aku Estebaranz.
El Acueducto en la fotografía. Colección Sáez-Laguna. Edita Ayuntamiento de Segovia. Segovia, 2009.
Segovia en la fotografía del siglo XIX. Colección Juan Francisco Sáez. Ricardo González. Editado por Doblón. Salamanca, 1997.
La iniciación en Segovia del Movimiento Nacional (julio-agosto 1936) por D. Juan de Contreras, marqués de Lozoya, cronista de la ciudad. Imp. "El Adelantado de Segovia". Segovia, 1938.
El Adelantado de Segovia diario del sábado 15 de agosto de 1936, Año XXXVI, Número 10156, de la Biblioteca Pública de Segovia.
Gaceta de Madrid, 20 de Octubre de 1884, R.O. 5 de Octubre de 1884, Núm 294.
Mi colección de fotos, láminas, y revistas antiguas de Segovia recopiladas en los últimos veintidós años.

lunes, 13 de julio de 2020

LOS FAROLES DEL ACUEDUCTO (1850-1890) Primera parte

     Cuando realizamos el estudio de la farola del Azoguejo engarzada a una pilastra del Acueducto nos dimos cuenta cuál eran los restos que dejaban las estructuras para sujetar esos faroles. Sin embargo, al buscar y observar más fotos pudimos comprobar, que eso que nos parecía algo muy raro con la idea actual de conservación del patrimonio, en el siglo XIX era algo mucho más habitual de lo que siquiera nos podíamos imaginar. Con lo cual, partiendo de cuatro diferentes fotos en las cuales veíamos claramente faroles engarzados al Acueducto nos pusimos a investigar en el Archivo Municipal. Era posible que hubiese algún farol más o si no, siempre podíamos hacer el recorrido paseando y buscando las características señales en las piedras.


      En la documentación del archivo municipal la primera búsqueda fue utilizando la palabra farola, pero no aparecían demasiadas referencias. En cambio al utilizar la palabra farol empezaron a aparecer todo una serie de documentos relacionado con el Alumbrado Público y teniendo en cuenta una buena datación de las imágenes disponibles empezamos a darle cada vez más coherencia.

    Partiendo de las fotos antiguas deducimos que hubo dos diferentes estructuras (palomillas en la documentación) para la sujeción de los faroles reverberos de combustible, la más antigua del siglo XIX que ya dibujamos de forma aproximada para el estudio citado.

 
     Al quitar el farol del Azoguejo ya conocíamos las marcas del engarce a la pilastra mediante una foto de Julio Duque fechada en 1909. Esos primitivos faroles con palomillas de tres puntos de engarce todavía tienen sus huellas en el Acueducto, aunque alguna cavidad se rellenó en algún momento con plomo.


      Esta estructura inicial para los faroles, utilizando una foto de E.K. Tenison de 1852, pensamos que se instaló entre 1845 y 1850. Según un informe del año económico 1878/1879 del cabo 1º de serenos, Antonio Villoria Esteban y firmado por el contratista Ángel Carrera, estos faroles eran de aceite de petróleo. En ese momento consta un inventario con 19 serenos de modo que encendían unos 18 faroles cada uno. Los volúmenes de combustible durante el año oscilaban entre los 17 centilitros en los meses de mayo a agosto, 20 centilitros para los meses de marzo, abril, septiembre y octubre y 25 centilitros de noviembre a febrero. Curiosamente consta que en los tres días de carnaval se aumentó a 27 centilitros cada farol y por la prensa de la época algunos de los años hubo denuncias ciudadanas, porque en algún caso no se encendían o no se atendían bien si se apagaban.

     En ese informe consta que había en la capital 342 faroles y 349 luces ya que algunas farolas de columna tenían varios faroles, como era una en la plaza Mayor y dos en la plaza de San Martín. Hemos recopilado algunos de estos faroles primitivos que nos aparecen en las fotos antiguas por lugares estratégicos de la ciudad.


      En el caso del Azoguejo pensamos con mucha probabilidad que se retiró en 1880, pero en otros lugares como en la calle del Romero pensamos que se mantuvo hasta mediados de la década de 1880, pero con una diferente palomilla con dos puntos de engarce. Por imágenes tenemos prueba de esta hipótesis con el farol de la puerta de San Andrés que en fotos de 1888 ya tiene el otro tipo de palomilla.

    Al revisar diferentes documentos del archivo municipal relacionado con el alumbrado público entre 1878 y 1890, sabiendo que todavía no había luz eléctrica en Segovia, encontramos curiosos datos. Por una comunicación al arquitecto municipal por parte del alcalde con fecha de 24 de febrero de 1879 conseguimos averiguar el año con total probabilidad que se decide eliminar el farol del acueducto en el Azoguejo.

     "En sesión de 20 del actual se ha acordado adquirir una farola candelabro para alumbrar en su centro la plaza Mayor en sustitución de la que existe con un solo farol, debiendo ser trasladada esta a la plaza del Azoguejo...". Por lo cual deducimos que al instalar la farola procedente de la plaza Mayor en el Azoguejo muy probablemente a sugerencia del arquitecto municipal, Joaquín Odriozola, se eliminaría el farol engarzado al Acueducto. Sin embargo, los periódicos de la época nos confirman que esto no se realizó hasta el verano de 1880.

 
      A partir de 1880 se empezaron en Segovia las pruebas de alumbrado público con gas de petróleo, que en capitales como Madrid o Barcelona se habían montado ya desde 1845 según consta en las subastas públicas del combustible. Pienso que esa época, a partir de 1880, en las peticiones de nuevos faroles por parte de los ciudadanos se utiliza la otra estructura característica en los faroles reverberos, que muy probablemente serían de gas de petróleo. Esta nueva estructura sólo tenía dos puntos de engarce de modo que sólo se hacían dos agujeros a la piedra correspondiente del Acueducto, pero como veremos no se hizo así. Por las huellas consideramos que en el caso de el Azoguejo no se instaló este tipo de palomilla.

    Pero centrémonos en el caso de los faroles engarzados al Acueducto. Otro perfectamente localizado y que todavía actualmente se pueden reconocer sus señales de engarce, estaba en la calle del Romero (Almira desde 1908). Para ello utilizamos una imagen realizada en 1879 por Jules David frente a la puerta de carruajes de la Academia de Artillería, y en la puerta de personal de la Academia hay otros dos faroles del mismo tipo.


     En este farol con las huellas que permanecen, después de analizarlo intensamente, llegamos a la conclusión de que lo más probable es que aprovecharon en la palomilla primitiva las cavidades de las calzas de las piedras. En cambio cuando se sustituyó, poco tiempo después por lo desequilibrado que se ve el farol en la foto de David, se hizo un nuevo agujero para el engarce de dos puntas.


    Volvamos a la parte más alta del Acueducto, pero en la zona oriental. Allí también tenemos localizado otro farol, justo en la pilastra donde arriba se encontraba en la hornacina la talla de San Sebastián. Para ello utilizamos una foto del segoviano Julio Duque circa 1908, pero ahora ya sabemos que en la propia foto de Clifford de 1853 aparece ese farol.


     Cuando obtenemos un detalle apreciamos más claramente el farol. En particular, de todos los faroles encontrados es el que estaba a menos altura desde el suelo.


     Como hemos obtenido la imagen de una fototipia no conseguimos más nitidez en la imagen, pero las huellas de la palomilla nos delatan el farol. Sabiendo perfectamente la localización en la pilastra de la hornacina, hicimos una foto antes de ayer para nuestro estudio.


     Las marcas nos indican que hubo una palomilla con tres puntos de engarce de las primitivas, las que suponemos que se instalaron hacia 1845 y de nuevo aprovechando dos de los agujeros se instaló posteriormente la otra palomilla (las instaladas entre 1880 y 1890) que es la que podemos ver en la imagen de Duque, justo por debajo de la cornisa y en cambio en la de Clifford el farol se sitúa más por encima de la cornisa. Posteriormente tenemos imágenes circa 1910 en que todavía permanece y una imagen de 1917 donde el farol y su palomilla ya ha sido eliminada.

     He de reconocer que de todas las huellas localizadas de los siete u ocho faroles del Acueducto no hay ninguna tan destructiva como ésta. Las tres cavidades de engarce hechas en tres piedras exceden en gran medida la arista de los hierros de sujeción de las palomillas, a no ser que el gran destrozo se hizo en el momento de quitar la palomilla.

      Acercándonos a la actual Fernán García, hubo otro farol justo en la conexión con la entonces calle de San Antolín (actual Ochoa Ondátegui) en la pilastra 12 a la izquierda con respecto a la de la hornacina en la que podamos apreciar el farol instalado, aunque no sea muy nítido el reconocimiento del farol. Es posible por el detalle de una foto realizada por Pelayo Artigas, profesor entonces de Matemáticas del Instituto, donada recientemente a la Real Academia de San Quirce por uno de sus nietos.


     En este detalle de otra imagen circa 1920 sí que se puede apreciar la palomilla de dos puntos de engarce y ya está eliminado el farol, pero hemos comprobado que todavía se mantiene en imágenes de 1926.


        Si todavía quedaba alguna duda por falta de nitidez en las fotografías antiguas, las huellas de los agujeros de la palomilla en las piedras del Acueducto nos confirman todas las hipótesis.

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      Esta entrada se la dedico a las segovianas y segovianos interesados por la Segovia antigua de nuestra ciudad Patrimonio de la Humanidad.
         Todo ha sido posible gracias a:
Las fotos antiguas facilitadas por el amigo Juan Francisco Sáez Pajares que nos sirven para explicarnos muchas hipótesis.
Documentos de Alumbrado Público, en especial un inventario de faroles (1877-1881), Informes (1879-1913) y una Relación de palomillas y columnas de luces superfluas de 1918 del Archivo Municipal de Segovia.
El Acueducto en la fotografía. Colección Sáez-Laguna. Edita Ayuntamiento de Segovia. Segovia, 2009.
Segovia en la fotografía del siglo XIX. Colección Juan Francisco Sáez. Ricardo González. Editado por Doblón. Salamanca 1997.
La Visita de Charles Clifford a Segovia del blog del amigo Aku Estebaranz.
J. David recorrriendo España: Retratos de grupos. Teresa García Ballesteros y Juan Antonio Fernández Rivero, 03/08/2017, del blog Colección Fernández Rivero de Fotografía Antigua.
La Tempestad semanario festivo del 12 de septiembre de 1880 dirigido por Vicente Rubio Lorente, Año I, Tormenta II, del Archivo Municipal de Segovia.
Las calles de Segovia, noticias, tradiciones y curiosidades de Mariano Sáez y Romero. Edición facsímil en offset por la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Segovia. Segovia, 1978.
Gaceta de Madrid, 20 de Octubre de 1884, R.O. 5 de Octubre de 1884, Núm. 294.
El apoyo en la divulgación sobre Segovia y aliento continuo de Isabel y Rafa del Archivo Municipal de Segovia por su gran disposición para cualquier información sobre la Segovia antigua.
Mi colección de fotos, láminas, y revistas antiguas de Segovia recopiladas en los últimos veintidós años.